Es porque la pastilla mejora la autoestima de los varones y, así, ellas se aseguran llegar a un orgasmo.Por: Carlos GalvánLejos, lejísimo, quedaron aquellos tiempos en que el consumo de Viagra era vergonzante. Ahora la novedad es que muchos varones jóvenes y sin problemas de disfunción eréctil dejaron de tomar la mágica pastilla a escondidas y empezaron a usarla a pedido de sus parejas. Es una tendencia que parece estar volviéndose cada vez más común, según confirmaron a Clarín diferentes sexólogos. "Las mujeres tienen hoy otras demandas, exigencias, necesidades y conocimientos. Y saben que si su pareja toma Viagra van a poder aguantar 2 o 3 rounds, que van a durar más y que van a tener una erección más prologada", enumeró Adrián Sapetti, sexólogo y presidente de la Sociedad Argentina de Sexualidad Humana.
Diana Resnicoff, psicóloga y sexóloga clínica, atiende habitualmente en su consultorio mujeres que reconocen que impulsan a sus parejas a consumir Viagra. "Son mujeres de 35 para arriba con parejas jóvenes que carecen de problemas orgánicos. Ellas saben que la pastilla permite que la autoestima de ellos suba y que los hará sentirse más tranquilos. Y, así, ellas van a tener más tiempo para alcanzar el orgasmo, o a veces incluso varios orgasmos".
El miércoles pasado, día en que Clarín la entrevistó, Resnicoff acababa de atender a una pareja. "Ella es un bombón pero él tiene problemas en el trabajo y eso repercute en su vida sexual. Por eso, ella lo alentó a que tomara la pastilla y viniera a la consulta", recordó la especialista.
Esther Buchholz, licenciada en Psicología y especialista en sexualidad, apuntó: "El acto amoroso deviene de una relación de amor, no de la cantidad de veces que mi pareja esté erecta. Puede estar ocurriendo que el varón ya no tenga más ganas de seguir pero lo estén obligando a continuar".
De acuerdo a Buchholz, una de las razones que pueden estar llevando a algunas mujeres a impulsar a sus parejas a tomar la pastilla es que "si eyacula precozmente, él de todas maneras va a poder seguir prolongando el acto sexual y tratando de que ella llegue al orgasmo".
Para Guillermo Vilaseca, psicólogo especialista en masculinidad, lo novedoso es "que la mujer va al frente y manifiesta su deseo de pasarla bien. Las mujeres de esta generación, en general, no se resignan: quieren llegar sí o sí al orgasmo".
Irene Meler, coordinadora del Foro de Psicoanálisis y Género de la Asociación de Psicólogos de Buenos Aires, no condena que algunas mujeres les pidan a los varones que tomen Viagra. Pero subrayó: "Hay una actitud voraz por conseguir, en lo inmediato, el máximo de placer".
Pregunta: ¿Puede una simple pastilla transformar a un varón en un hábil amante? Los especialistas coinciden en que no. Pero Buchholz apuntó: "También es cierto que un gran amante podrá sacar mejor partido de sus cualidades gracias a la medicación".
Otra pregunta: ¿No hiere la autoestima de las mujeres que sus parejas tomen Viagra para tener sexo con ellas? Parece que no es algo que debería ocurrir. "En mis tiempos, ante algún contratiempo, algunas mujeres decíamos 'ya no te excito'. Pero ahora las mujeres saben que para que la pastilla haga efecto debe haber deseo, que el varón tiene que tener ganas de estar con ella", dijo la licenciada Buchholz.